Escorts para parejas ¿Cómo contratar a una y lograr que todo salga bien?

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En una pareja a veces hay momentos en los que la pasión parece perder fuelle, en el que las cosas se vuelven más lentas e impredecibles, y se necesita un esfuerzo especial para que todo siga adelante y la cosa no acabe de forma abrupta. El sexo es algo muy importante en la pareja, sobre todo cuando empieza a flaquear, porque puede ser una grieta por la que se empiecen a colar problemas que nos hagan sentir que estamos perdiendo el control de la situación. Por eso siempre es bueno probar cosas nuevas y diferentes.

Así es como una pareja puede verse en la tesitura de contratar a una profesional del sexo para disfrutar con ella de una relación diferente. Un trío es una de las fantasías más habituales tanto para ellos como para ellas, así que hacerlo con una profesional, que conoce perfectamente la dinámica y sabe muy bien cómo tiene que atender a ambos, puede ser una experiencia que logre desatascar las barreras de nuestra relación. Claro que para realizarlo en condiciones hay que saber muy bien cómo hacerlo.

Acuerdo mutuo entre la pareja

Está claro que si queremos contratar a una chica profesional para disfrutar del sexo con ella y nuestra pareja, antes que nada tenemos que llegar a un acuerdo con nuestro novio o nuestra novia. Decidirlo entre las dos partes y entender que será algo para el disfrute de los dos, y no solo de uno, siempre que esa sea la opción que elijamos. Lo mejor es tenerlo todo pensado y tratar cualquier aspecto que pueda generar el más mínimo roce. Estar muy seguro de lo que se hace y que los celos nunca jamás entren en la ecuación, porque eso acabaría por completo con todo lo demás. De ahí que deba ser una decisión consensuada y muy bien meditada, para que se pueda seleccionar a la chica ideal.

Dónde llevar a cabo el encuentro

La mayoría de profesionales pueden desplazarse allí donde les pidamos, aunque si lo hacemos en nuestra propia casa, en la habitación donde dormimos siempre, puede ser algo un poco más extraño, y tal vez los sentimientos nos jueguen alguna que otra mala pasada. ¿La solución más lógica? Acudir a un hotel, por ejemplo, para que sea “terreno neutral” para todas las partes. La profesional está más habituada a eso, y lo mejor es que tendremos una experiencia totalmente única allí, diferente al resto de las que hemos podido tener en nuestra cama de siempre. Es además algo más seguro para la propia chica de compañía, porque algunas temen entrar en casas particulares de los clientes.

Tener una idea clara de lo que se va a hacer

Como decíamos hace un par de puntos, lo importante es tener clarísimo qué tipo de encuentro queremos tener. Si queremos algo más romántico, algo más salvaje, si queremos llevar nosotros las riendas o dejarnos llevar por lo que la chica nos proponga… Hay que saber muy bien cómo prepararlo todo porque de esto dependerá el éxito final del encuentro. De no hacerlo, podemos caer en cualquier fallo de percepción y mandar todo al traste. La confianza plena en nuestra pareja también es imprescindible para disfrutar de este placer en trío, porque por parte de la chica profesional seguro que vamos a tener un trato excelente. Por cierto, es bueno buscar juntos a la chica adecuada y elegirla entre los dos.

No continuar el contacto con la escort después de la experiencia

Tras ese momento de pasión y si todo va bien, seguramente nuestra vida sexual vuelva a animarse, al menos por un tiempo, ya que hemos descubierto una nueva forma de entregarnos al placer y recuperar la llama. La intención de involucrar a una tercera persona, en este caso una chica profesional, viene dada solo como incentivo para que la llama se prenda. Sin embargo, una vez terminemos con eso, lo mejor es olvidarnos por completo de esa escort y no mantener el contacto con ella, ya que eso significaría que habría algo más que una simple pasión momentánea. En caso de querer repetir, es mejor buscar a otra profesional, para no mezclar sentimientos ni emociones que pueden confundirnos.